Grupos terapéuticos y grupos ideológicos; aproximación a una explicación dialéctica.

Resumen

El problema de los grupos ideológicos ya fue abordado por Freud, en "Psicología de las masas y análisis del yo", pero sin considerar al factor ideológico como fuerza aglutinante grupal. Los autores definen lo que entienden por grupo ideológico y por grupo terapéutico, así como el concepto de situación grupal. Destacan que los grupos terapéuticos suponen una noción contradictoria y dialéctica con respecto a los grupos nómicos ("sanos"). De modo que el psicoterapeuta de grupo y el sociólogo son dos aspectos complementarios del analista de grupo. Una de las funciones del terapeuta de grupo es reintegrar el grupo de pacientes a los grupos nómicos. Se caracteriza la situación grupal terapéutica como bigrupal y unifuncional y se considera a la aspiración latente del grupo de pacientes de identificarse introyectivamente con la ideología de los terapeutas como la fuerza centrípeta que mantiene la cohesión del grupo. Esto hace del grupo terapéutico un grupo ideológico. Se intenta caracterizar los dos grupos de la gestalt terapéutica, el grupo de terapeutas y el grupo de pacientes y se estudia la interrelación dialéctica entre ambos. Se considera al grupo de terapeutas como un grupo puente entre el grupo de pacientes y el grupo social sano. Se enfatiza la necesidad de una co-hesión ideológica entre los diferentes terapeutas y se da un ejemplo de las consecuencias para el grupo terapéutico de la falta de unidad ideológica entre los terapeutas. Las características del grupo de terapeutas serían: 1) es un grupo que posee una ideología "utópica"; 2) es un grupo "sano" mentalmente; 3) está bien adaptado a la sociedad. En cambio, el grupo de pacientes tendría características opuestas. La función del grupo terapéutico sería la de resolver la contradicción dialéctica que tiene el grupo de pacientes, Sintiéndose éste el depositario de la enfermedad mental de la sociedad. El éxito depende de poder introyectar la ideología de los terapeutas y hacer entonces una síntesis con su propia ideo-logía, de modo de adquirir una nueva ideología que les permita su reintegración social. Podría hablarse entonces de "curación ideológica" como uno de los mecanismos de curación de un grupo terapéutico. Finalmente, se estudian algunas aplicaciones de observaciones recogidas en los grupos terapéuticos a los grupos nómicos ideológicos. En primer término, el fenómeno de la división en los grupos en relación con la desidealización patológica del líder, y se da un ejemplo extraído de un grupo terapéutico. En segundo lugar la aparición y condena del "traidor". Se considera a éste como una necesidad para el grupo en determinados momentos de su desarrollo, constituyéndose en el depositario de las traiciones potenciales o reales de todo el grupo, de modo que el traidor sería en definitiva el chivo emisario de la culpa persecutoria del grupo.